Resulta que hasta el mes pasado no supe que mis padres, el día en que se casaron, habían ido en un Cadillac, uno de esos modelos de los años 50 o 60 tan vistosos. Y como yo no fui invitado a aquella boda y nadie me lo había dicho, desconocía este hecho, que no sé si era usual cuando se casaba un trabajador de Altos Hornos (menos no me imagino). El coche en cuestión era propiedad de los que regentaban una pastelería de la calle Arrandi y no hay ninguna foto en el que se le vea entre las de tan importante celebración. No pretendo que nadie ahora saque una foto de este coche de sus viejos álbumes (sería demasiado), sino que soy yo el que va a poner unas cuantas fotos de coches singulares hechas en las calles de Barakaldo y que me han llamado la atención.
Y aunque no me gusta retocar las fotos, he borrado las matrículas por si acaso alguno había dejado aparcado el coche donde la querida (o viceversa) y le voy a generar un mal rollo a lo tonto. Ya sé que el modelo le puede delatar, pero haberlo pensado antes y haber comprado un coche normalito.
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| Mini fotografiado en una muestra callejera en 2012. |
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| No sé si quedan hippies en Barakaldo, pero está Volswagen T2 cerca de Gernikako Arbola era su modelo preferido. |
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| Ford Fiesta de primera generación |
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| Rolls Royce Silver Shadow, dejando a mis padres como unos pobretes. |
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| El 2 CV, uno de los coches más simpáticos. |
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| Toyota Celica Coupé |
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| Leyland Sherpa |
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